Capitulo VIII

Pero al despertar de nuevo a la mañana siguiente, una emoción me asalto de pronto. Alice de nuevo me dejaría hermosa, quería volver a ver en los ojos de Bill, asombro; quería sentarme de nuevo a su lado en la camioneta de mi papá, pasar la mañana entera con él. Regresar a casa y escucharlo cantar, el día anterior habían ido a comprar los instrumentos con Rosalie, ahora que tenían todo listo ofrecerían un pequeño concierto para nosotros esa noche. Y moría de ganas por escucharlo. Algo dentro de mí me decía que sería perfecto.

Tom poco a poco se iba abriendo con nosotros, aunque la mayoría del tiempo sólo permanecía al lado de Bill sin decir nada, suponía que con él si se comunicaba y éste alzaba la voz por los dos, sólo lo había visto conversar con Rosalie, ambos comenzaban a encariñarse, pues uno llenaba las carencias del otro. En la escuela no abría la boca para nada, sólo lo había escuchado contestar alguna pregunta directa del profesor de Biología, pero podía notar como llamaba la atención mis compañeras, incluso varias me habían preguntado por él, querían saber por qué era tan serio.

No sabia que contestar a eso. La historia para cubrir su identidad, era que eran alumnos Alemanes de intercambio, habían venido a aprender ingles, por esa razón Tom no hablaba mucho, pues todavía no lo dominaba, para Bill era más fácil pues ya lo había aprendido desde pequeño, sólo quería perfeccionarlo.

La semana transcurrió así, asistiendo a clases y en las tardes escuchando sus ensayos, realmente lo hacían muy bien, habían compuesto muchas canciones, claro en Alemán, pero con ayuda de Alice las estaban traduciendo al ingles. Mi confusión se hacia cada ves mas grande, Jake me hablaba por las noches, y platicaba cerca de una hora con él, le contaba todo lo que había hecho en el día, pero me sentía muy mal al comprobar que la mayoría de mis actividades las había realizado con Bill, mi conversación siempre era así: fui con Bill a… luego Bill y yo hicimos… después de que Bill… Bill y yo…, pero lógicamente a Jake no le importaba, el no veía en mi una pareja, para él era sólo una niña, como su hermana menor, y su hermanita podía tener novio, y el no moriría de los celos por eso ¿verdad?

Por las noches, pensaba más en esto, y muchas veces llegaba al llanto, quería que Jake me quisiera como yo a él, imaginarme abrazada a su cuello por la eternidad me hacia sentir completamente dichosa, desde siempre lo había soñado así, siempre a su lado ¿Podría pasar que cuando me convirtiera en mujer el llegara a amarme? Cuando mi cuerpo era el de una niña no me imperaba la necesidad de su amor, lógicamente el no amaría a un bebé, ahora que parecía una adolescente, tampoco. Él había dejado de crecer cuando tenia 17 años, cuando había sufrido su primera transformación a hombre lobo, a lo mejor en unos meses yo me vería de esa edad, y fin me amaría. Pero entonces recordaba que el siempre había estado enamorado de mi madre, y me moría de celos. Mientras él siguiera pensando en ella jamás voltearía a verme a mi.